viernes, 23 de noviembre de 2007

LA ORGANIZACIÓN DE LA PSIQUIS...



“Cuando hablo de ORGANIZAR LA PSIQUIS, debe saberse entender. Tenemos que manejar energías, saberlas utilizar; no identificarnos (para no malgastar nuestras energías torpemente), no olvidarnos de sí mismos”.“Cuando uno se olvida de sí mismo y se identifica, entonces no puede dar forma a la psiquis, no puede hacer que se estructure inteligentemente, en sí misma, porque malgasta las energías torpemente. Esto es urgente entenderlo, mis queridos hermanos”...“Así, pues, un Hombre verdadero es un Hombre que ha ahorrado sus energías y que, mediante las mismas, ha podido crear los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser. Un Hombre verdadero es aquél que ha recibido sus principios anímicos y espirituales. Un HOMBRE PERFECTO es aquél que ha desintegrado, dijéramos, todos los «elementos psíquicos inhumanos», y que en vez de esos «elementos indeseables», ha dado forma al HOMBRE INTERIOR”.Viene un alma al mundo y, sin ningún esfuerzo, recibe un cuerpo físico, un cuerpo maravilloso, con unas quince mil millones de neuronas a su servicio.Conforme el niño va creciendo, la Mente Sensual se va abriendo poco, y ésta última, por sí misma, se va informando mediante las percepciones sensoriales externas. Es precisamente con los datos aportados por tales percepciones, como la Mente Sensual, tal como ya afirmamos, elabora siempre sus conceptos de contenido, motivo por el cual ella jamás puede saber algo sobre lo REAL; sus procesos razonativos son subjetivos, se mueven dentro de un círculo vicioso: el de las percepciones sensoriales externas...Ahora comprenderán ustedes, un poco mejor, lo que es la Razón Subjetiva en sí misma. Mas ha de hacerse una plena diferenciación entre Razón Subjetiva y Razón Objetiva.Es obvio que el niño tiene que pasar por los procesos educacionales: Kinder, Primaria, Secundaria, Preparatoria y hasta Universidad. La Razón Subjetiva se nutre con todos los datos que las distintas instituciones escolásticas le aportan, mas en verdad que ningún Instituto docente podría dar al niño, o al joven, o al adolescente, datos exactos sobre ESO que no es del tiempo, sobre ESO que es lo REAL.En verdad, amigos, que las especulaciones de la Razón Subjetiva vienen a conducir al intelectual, al terreno absurdo del utopismo, o en el mejor de los casos, al de las simples opiniones de tipo subjetivo, mas nunca a la experiencia verdadera de ESO que no es del tiempo, de ESO que es la VERDAD.En cambio la Razón Objetiva (que desgraciadamente no recibe ninguna instrucción y para la cual no hay escuelas), permanece siempre abandonada. Los procesos razonativos de la Razón Objetiva nos conducen a postulados exactos y perfectos, pero el niño, de sitio en sitio, es educado subjetivamente; para él no existe ninguna forma de instrucción superior.Los datos que los sentidos aportan a la Mente subjetiva del adolescente (a la Mente Sensual, dijéramos), todas las cuestiones escolásticas, de familia, etc., son meramente empíricas y subjetivas, y eso es lamentable.En un principio, el niño no ha perdido todavía la CAPACIDAD DE ASOMBRO. El se asombra ante cualquier fenómeno; un hermoso juguete despierta en él asombro, y se divierte el niño con sus juguetes. Mas, conforme va creciendo, conforme su Mente Sensual va recibiendo datos de la escuela, del colegio, la CAPACIDAD DE ASOMBRO va desapareciendo, y al fin llega el instante en que el niño se convierte en joven, en un joven ya ha perdido por completo esa capacidad.Desafortunadamente, los datos que uno recibe en los colegios, en las escuelas, en los centros educacionales, en las academias, en las universidades, etc., sólo sirven para nutrir a la Mente Sensual, pero nada más. En esa forma, y con esos sistemas de educación actuales, lo único que se logra es forjarnos una PERSONALIDAD ARTIFICIOSA.En nombre de la verdad hemos de decir que las materias que se estudian actualmente en los Institutos docentes, no tienen relación alguna con las distintas partes del Ser. Por eso es que sólo sirven para falsear los cinco cilindros de la máquina orgánica, quitarnos la CAPACIDAD DE ASOMBRO, desarrollar la Mente Sensual y forjar en nosotros una personalidad falsa, y eso es todo.Es conveniente entender que la Mente Sensual, por muy culta que parezca, nunca podría sacarlo a uno del automatismo y de la mecanicidad en que se encuentra toda la gente, todo el mundo.Si además a esta cuestión le añadimos nosotros los dogmas de fe, las conjeturas espirituales, las hipótesis religiosas de la Mente Intermedia, es obvio que el ser humano se encuentra actualmente en un callejón sin salida, un callejón en el que no puede existir una transformación radical.Una cosa es el hombre meramente animal, es decir, el «animal intelectual», y otra cosa (en verdad muy diferente, por cierto) es el verdadero HOMBRE PSICOLOGICO. Al citar a la palabra «hombre», incluyo también, naturalmente, a la mujer...Nacemos con un cuerpo físico maravilloso, pero en realidad de verdad necesitamos hacer algo más...Formar el cuerpo físico, no es difícil (lo heredamos), pero formar al HOMBRE PSICOLOGICO, sí es difícil. Para formar el cuerpo físico no necesitamos trabajar sobre sí mismos, pero para formar al HOMBRE PSICOLOGICO, sí debemos trabajar en sí mismos.Se trata de ORGANIZAR LA PSIQUIS para crear al HOMBRE PSICOLOGICO, que es el verdadero hombre, en el sentido más completo de la palabra. Distíngase, pues, entre el «animal intelectual» y el verdadero y auténtico HOMBRE PSICOLOGICO.Nosotros necesitamos trabajar sobre sí mismos, si en que queremos crear a tal Hombre. Sin embargo, hay lucha en nosotros: la Mente Sensual y la Mente Intermedia son enemigas declaradas de la Mente Interior.La Mente Sensual, por ejemplo, se identifica con cualquier circunstancia. Si de pronto nos hallamos en opíparo banquete, nos identificamos tanto con las viandas que nos convertimos en glotones. Si se nos brinda una copa, nos identificamos tanto con el vino que terminamos embriagados. Si encontramos en nuestro camino a una persona del sexo opuesto (fascinante, interesante), nos identificamos tanto con aquélla, que terminamos nosotros en fornicaciones o convertidos simplemente en adúlteros. En estas circunstancias, y de este modo, no es posible crear al HOMBRE PSICOLOGICO.Si por alguna parte hemos de iniciar el trabajo de crear al HOMBRE PSICOLOGICO, será trabajando sobre sí mismos y no identificándonos, jamás con ninguna circunstancia, y auto-observándonos de instante en instante, de momento y momento.Hay quienes yerran el camino. Existen Sociedades, Ordenes, Logias, Religiones, Sectas, que pretenden organizar la psiquis humana mediante ciertas máximas de «oro»; comunidades que pretenden, mediante tal o cual máxima, comportarse en todas las circunstancias de la vida, a fin de conseguir algo que ellos llamarían «purificación», «santidad», etc. Todo esto es urgente analizarlo...Es obvio que una máxima cualquiera, de tipo ético, religioso, nunca podría servir de patrón para los distintos aconteceres de la vida. Una máxima, aún estructurada con la LOGICA SUPERIOR de un Ouspensky, por ejemplo, en verdad que jamás podría crear un nuevo Cosmos, ni una nueva Naturaleza.Supeditarnos estrictamente a una máxima, con el propósito de organizar nuestra psiquis, sería absurdo. Esto significaría convertirnos en esclavos...De manera que, conviene que reflexionemos sobre muchos catálogos éticos y códigos morales, con «máximas de oro». Todas esas reglas o «máximas», jamás pueden transformar a nadie. Además, hay factores que hay que analizar, antes de poder entrar uno en el trabajo de organizar la psiquis.Incuestionablemente, un enunciado demostrativo, por ejemplo, por muy rico que él fuese, y perfecto, podría ser falso, y lo que es peor: intencionalmente falso. Así que, al intentar nosotros una transformación de sí mismos, tenemos que volvernos un poco más individuales (no quiero decir «egoístas»). Entiéndase esto como APRENDER A PENSAR MEJOR y en una forma independiente y perfecta.Muchas sentencias sagradas («máximas de oro», como dije; aforismos que todo el mundo considera perfectos), realmente no podrían servir de patrón de medida para conseguir una transformación auténtica y una organización de la psiquis dentro de nosotros.Se trata de ORGANIZAR LA PSIQUIS INTERNA, y tenemos que salir de tanto racionalismo de tipo subjetivo, e ir a los hechos: afrontar nuestros propios errores, como son; no querer nunca justificarlos, no tratar de huir de ellos, no intentar disculparlos.Se necesita que nos volvamos más serios; en la ANALITICA, tenemos que ser, dijéramos, más juiciosos, más comprensivos. Si en verdad no buscamos escapatorias, entonces sí podemos trabajar sobre nosotros mismos para conseguir la organización del HOMBRE PSICOLOGICO y dejar de ser meros «animales intelectuales», como hasta ahora somos.La auto-observación psicológica es básica. Se necesita, en verdad, auto-observarnos de instante en instante, de segundo en segundo. ¿Con qué objeto? ¡Uno! ¿Cuál? Descubrir nuestros defectos de tipo psicológico, pero descubrirlos en el terreno de los hechos, observarlos directamente, juiciosamente, sin evasivas, sin disculpas, sin escapatorias de ninguna especie.Una vez que un defecto ha sido debidamente descubierto, entonces y sólo entonces, podemos nosotros comprenderlo...Muchos, cuando intentan comprender un error, lo justifican, o lo evaden, o lo esconden de sí mismos, y eso es absurdo. Hay también algunos que, al descubrir tal o cual defecto en sí mismos, comienzan con su Mente (dijéramos, teorética) a hacer especulaciones y eso es gravísimo, porque como ya dije, las especulaciones de la Mente (meramente subjetivas) van a desembocar, forzosamente, en el terreno del utopismo...Así, pues, si se quiere entender un error, las especulaciones meramente subjetivas deben ser eliminadas, y para que sean eliminadas, se necesita haber observado el error directamente. Sólo así, mediante una correcta observación es posible corregir la tendencia a la especulación.Una vez que uno ha comprendido íntegramente cualquier defecto psicológico, en todos los niveles de la Mente, entonces sí puede darse el lujo de quebrantarlo, de desintegrarlo, de reducirlo a cenizas, a polvareda cósmica. La Mente, por sí misma, puede rotular cualquier defecto con distintos nombres, puede pasarlos de un nivel a otro, esconderlo de sí misma, esconderlo de los demás, pero nunca desintegrarlo.Muchas veces lo he dicho anteriormente: necesitamos de un poder que sea superior a la Mente, de un poder que, en verdad, pueda reducir a cenizas cualquier defecto de tipo psicológico.Afortunadamente, ese poder existe en el fondo de nuestra psiquis. Me refiero, claramente, a Stella Maris, la Virgen del Mar, que es una variante de nuestro propio Ser, pero derivado. Si nosotros nos concentramos en esa FUERZA VARIANTE que existe en nuestro interior (y que los egipcios denominaron «ISIS», los aztecas «TONANTZIN», los romanos «DIANA», etc.), seremos asistidos. Entonces, el defecto en cuestión podrá ser reducido a polvareda cósmica.Cualquier «agregado psíquico», viva personificación de tal o cual error, una vez que ha sido desintegrado, libera un porcentaje de eso que se llama «ESENCIA». Es claro que, dentro de cualquiera de esas «botellas» conocidas como «agregados psíquicos», existe ESENCIA o CONCIENCIA ANIMICA enfrascada. Al quebrantar éste o aquél error, el porcentaje de Esencia, allí depositado, es liberado.Cada vez que un porcentaje de Esencia Búddhica es liberado, aumenta de hecho y por derecho propio el porcentaje de Conciencia. Así, conforme nosotros vamos quebrantando los «agregados psíquicos», el porcentaje de Conciencia despierta se irá multiplicando, y cuando la totalidad de los «agregados psíquicos» sea reducida a cenizas, la Conciencia habrá despertado, también en su totalidad.Si tan sólo hemos quebrantado un cincuenta por ciento de «elementos indeseables», obviamente poseeremos un cincuenta por ciento de Conciencia Objetiva, despierta. Mas si nosotros conseguimos quebrantar el ciento por ciento de los «agregados psíquicos indeseables», logramos de hecho y por derecho propio, un ciento por ciento de Conciencia Objetiva. Así es que, a base de multiplicaciones incesantes, nuestra Conciencia irá resplandeciendo cada vez más; eso es obvio...Lograr el absoluto despertar es lo que queremos en estos estudios. Necesitamos una transformación radical. Necesitamos una completa Revolución de la Dialéctica para entrar sin más teorías en ese Camino estrecho, angosto y difícil que nos conduce a la liberación final...

VENERABLE MAESTRO SAMAEL AUN WEOR.